lunes, 9 de mayo de 2016

CREACIÓN DE COMUNIDADES CAMPESINAS

No hace pocos días, 4 de Abril, debido a una nueva actividad de mi trabajo, visité al Centro Poblado de HUACHIPAMPA, jurisdicción del distrito de San Lorenzo de Quinti, de la Provincia de Huarochirí, Lima, a un levantamiento perimetral, lo que vendría ser más adelante el Plano de Conjunto; esto, con la finalidad de concretar, según Asamblea General, la creación de Una Nueva Comunidad, denominada: “Comunidad Campesina de Huachipampa”
Pues en el trayecto de este recorrido, Partiendo de Lima, San Mateo y llegar al Centro Poblado, a riveras del Río Yuracmayo; y siguiendo por este río aguas arriba, subiendo cota en cota las alturas, nos encontramos interrumpida nuestro viaje debido a una volcadura de un camión al margen de la carretera, felizmente sin incidencia que lamentar.  


Luego de “colaborar” con un poco de ayuda, a manera de calentar el cuerpo, nos cedió el paso; y continuamos nuestro ascenso por esta trocha carrozable y llegar al centro Poblado de Carhuapampa; pues sin darme cuenta, desperté, dándome con la sorpresa que estaba lloviendo. Al ver que los pasajeros no mostraban preocupación alguna debido al evento, pues me calmé.
Después de un trayecto largo, luego de la última parada, llegamos, a las 6 de la tarde aproximadamente, por fin, al Centro Poblado de Huachipampa.

Lo primero que me impresionó fue las viviendas; no eran la que acostumbrabas a ver en cada visita  que hago; eran barios conglomerados de Chulpas dispersos en grupo. Uno levanta la mirada, ve una cantidad de domos humeantes, esto debido que en cada chulpa están, en esa hora, cocinando. Son pequeñas viviendas circulares de piedra y barro con techos cónicos de cobertura de ichos, sostenidas con palos o varillas de maderas, muy bien hilvanadas, que no pasan ninguna gota de agua.

El vehículo que me transportó continuará a su final recorrido, Tanta. 
Apenas baje, fui bien recibido por don Andrés Ramos y don Julio Lázaro, sonriente y preguntándome el bienestar de mi viaje, me invitaron a pasar a servirme una sopa bien calientita; pero antes, don Andrés, me presenta a su esposa, muy carismática ella, la señora Honorata Lázaro.
Para no creer, dentro de la vivienda, una mesita pequeña un banquito para capacidad de tres personas, al frente un fogón que da calor al recinto, y en ella muy atareada la señora Honorata se ajetrea con la cocina. Me acomodo en la banquita dejando dos espacio para los personajes de mi recepción, don Andrés y don Julio, pero optaron en sentarse al borde del catre.


Pero que bien acondicionado estaba la vivienda: comedor cocina y Dormitorio; la sala está en la entrada de la puerta, compuesta por un amplio patio con bancos de maderas o troncos cubiertas con piel de ovejas; el patio o sala, está contorneada de muros de piedras y barro evitando el choque frontal del frío viento; Continuando al patio, otras viviendas similares.
Me invitaron a cenar una sopa y segundo, este último, acompañado de arroz, bien cosida, digo esto por la experiencia que tengo que, debido a la altura el arroz difícilmente llega sancocharse; pero este arroz estuvo de sancochado tan igual como es característica en la costa. Finalmente un “mate” de hierva silvestre. Don Andrés y Don Julio me acompañaron a donde debería pasar la noche; valla que sorpresa nuevamente, ¡¡ un Hotel !! Una infraestructura de muy bien acabado, con las adecuadas comodidades, amplio corredor, buena iluminación,  sala de recepción y un  servicio higiénico completo. Sólo que ese día no pude dormir como en común de los días; me faltó oxígeno (4,200 m.s.n.m.) Pero en fin, amanecí bien y de ánimo.
Al día siguiente, a las 8 de la mañana, como estuvo programado una Asamblea General, nos reunimos en su Local Comunal, otra infraestructura bien acabada, asistiendo algunas delegaciones que aparecían venir de las alrededores de la comarca desde sus estancias. Ya muy acomodadas de sus respectivos asientos se dio inicio de la reunión.



Esta asamblea o reunión tiene como finalidad de explicarles el proceso administrativos a seguir; los documentos a presentar y las actividades inmediatas a realizar en campo y en los registros Públicos; más el tiempo de duración que tendrá esta gestión. Esta reunión es muy buena, por cuanto se les comunica a los interesados “fríamente” y directo, lo que va ocurrir durante el proceso de la Creación de una Comunidad. Para que, enteradas luego, comprendan si es factible o no continuar con los entusiasmo de la Creación de la Comunidad. En vista que sus deseos era tan inquebrantable, optaron en proseguir lo ya destinado acuerdo.
Este entusiasta motivación de aplausos después de la reunión, don Pedro Angome Gamión Presidente de la Directiva Comunal y gestor, brinda acompañar a este entusiasmo apoyo a su Directiva con una botella de vino. Todos nos dimos las manos, como pacto de llegar a un gran fin: la Creación de la Comunidad Campesina de Huachipampa.


Finalmente, después de la reunión, inicié mi trabajo de campo mediante los aparatos y planos con las cuales acostumbro operar.
Al recorrido fui acompañado por un comunero, al quien no recuerdo el Nombre, fue quien muy conocedor de los linderos concluimos rápidamente. Claro, con el acompañamiento además del Presidente, señor Pedro Angome.
Ya de regreso, a mi despedida, estuve acompañado de los mismos quienes me recepcionaron mi llegada: Don Andrés Ramos y don Julio Lázaro:





Ya en en Tanta, un pueblo aledaño, capital del distrito de Tanta de la provincia de Yauyos, Lima, en busca de movilidad que me llevará a Jauja y de esta a Lima.



Siendo esto una de las muchas gestiones que ocurre en la serranía de nuestra patria, el deseo de constituir su propia Comunidad Campesina, es momento propicio para dirigirme a los interesados que, procuren acercarse a sus correspondientes Gobiernos Regionales e indagarse de los requisitos que se requiere para esto.
No es simplemente porque me da la gana de crearme una Comunidad, ni de caprichos de desligarme de otra Comunidad Matriz; existen características bien marcadas que dilucidaran la incongruencia social, costumbres, creencias y localización geográficas que ameritan la desligazón en relación con la Comunidad Matriz. Esta evaluación la realizan las Brigadas encargadas a este caso. Toda esta gestión, tiene una duración aproximada de tres años.


Los requisitos genéricos los encuentran en el TUPA de cada Gobierno regional, complementando, con los posibles algunos requisitos, visitando a la misma sede encargada en asuntos de Comunidades Campesina. En este caso, Lima, se pueden dirigir a la Dirección Regional de la Formalización de la Propiedad Rural, DIREFOR, ubicado en Paseo Colón 313, segundo piso. 

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