lunes, 29 de agosto de 2016

LA COLOCACIÓN DE HITOS O SEÑALES EN LOS LINDEROS PREDIALES
ADJUDICADOS POR COMUNIDADES CAMPESINAS

En cierto modo, una vez que las Comunidades Campesinas hayan determinado la adjudicación de los predios solicitados por los recurrentes, en este caso por los mismos comuneros sean calificados o no calificados, mediante Asamblea General Extraordinaria, los beneficiarios,  y los Planos que adjuntaron a sus solicitudes, recurrirán al COFOPRI, solicitar la Certificación Negativa de Zona Catastrada y la Constancia de Inexistencia de posesionarios Informales; dado que estas gestiones duran aproximadamente un año y medio. Sin estos requisitos, aparte de los Partes Notariales, no se podrán registrar en los Registros Públicos.
Muy aparte a esto, la Directiva tramitará la inscripción de la Facultad para suscribir las documentaciones de la transferencia. En este punto, recomiendo que la FACULTAD ESPECIAL debe ser otorgada a un comunero o al mismo Presidente de la Comunidad, pero NO como Presidente, sino, como una Persona Natural; por cuanto del Presidente, sólo tiene vigencia  entre su mandato de persona Jurídica, luego concluye.
Por lo general los terrenos pastales adjudicados no cuentan con cercos, hitos o señales definidos; para lo cual, al momento de la diligencia por la entidad responsable de la entrega de las Constancias y Certificados obliga que los terrenos cuenten con linderos definidos y visibles. Por cuanto se le es más rápido la interpretación catastral de los Planos del Expediente con el Terreno in situ.
Como experiencia de la colocación de hitos, les contaré mi viaje a la Comunidad Campesina Túpac Amaru de Azángaro de la Provincia de Yauyos, departamento de Lima.
Un diecisiete de Agosto de este año 2016, no hace poco, fui a los predios que necesitaban la colocación de hitos. Para lo cual, previamente mandé se cortara los fierros corrugados, a .25 cm., en una cierta cantidad para cada predio. Además, una tarro pintura de un cuarto de Litro de color mandarina (Óxido). Para, esto, ya tenía por conversado la movilidad, alojamiento y la alimentación.
Apenas llegué  a Azángaro, una motocicleta me esperaba para mi traslado al Anexo de Miraflores, lugar estratégico para pernoctar y planificar mis salidas. Ronald Quispe (“Ronaldiño”) fue quien me trasladó a Miraflores; luego de 10 minutos estamos ya bajando de la Moto.

Ronal, a la espera de mi traslado.

Llegamos al Anexo de Miraflores.

La vivienda de Don Alejandro Quispe, en donde me hospedaré.

Luego de la presentación y designado el alojamiento, pasamos a brindarnos una sopa caliente acompañadas de las papita aún con las aromas típicas de ser muy natural y ecológico. Charlamos de la los papeles en trámites y las diligencias que se avecinas; asimismo, de las colocaciones de hitos de los linderos.

Al día siguiente, antes que salga el sol, empezamos a ubicar mediante GPS los puntos de las Coordenadas UTM de cada punto controvertidos principales que figuran en los Planos. De esta manera se trabajó sin  dificultades.

Aquí está Don Teófilo E. Quispe, acompañado de sus dos hijos, Wlison y Alejandro.

Don Teófilo Quispe Santiago con uno de sus hijos menores, Wilson.

Y una foto para el recuerdo con los titulares de los predios.

En el última día de la diligencia, dado el lugar agreste y por la lejanía del lugar, tuve que contratar a un personal con las cualidades pro-activa e inteligente; es así que , el joven Wilson Quispe, fue la persona que verdaderamente demostró en campo esas cualidades. Cargar piedra y escalar cerros dándome ánimo y orientación para subir. Gracias a él, que el trabajo fue muy bien llevada sin ningún contratiempo.



Primero la alimentación





 
Ya muy próximo a la meta, a pocos metros de " Cerro Chihuipunta"

Pintando y repintando.

El sol está abrazador. Y el agua está que se agota.

También aproveché estar presente en una de las costumbres que perduran aún por nuestra serranías, las Herranzas. Esto fue en la misma capital del distrito de Azángaro, en las afueras aledañas corrales que no faltan. Había comida de sobra, que muy gentilmente, la Señora Luisa Saravia, invitaba a todo los moradores de Azángaro; entre ellos Yo.

Ya próximo a la Herranzas, luego de las viandas, los invitados, la Orquesta y la cantante de los wuaqrapukus, la Señora Zósima Saravia y su Tinlla, se trasladaban al Corral, lugar de la brega.

Las gentes esperan en los contornos del corral. Don Santos Palomino y su señora Sonia, acompañada de su niñita Yulian Quispe, además, la señora Apolinaria Lázaro nos encontramos en busca de un lugar privilegiado para ver esta corrida.





 Vemos que la comparsa sube al compás de la orquesta y la tinlla. 


Ya los ganados están en el corral a la vigilia de un perro pastor.

 Se acomodan las cervezas y la orquesta en lugares seguros al cuidado de las Madrinas


 Aquí, todo es rápido.

 

Empezó la tinlla y el Wuaqrapuku a dar su cánticos festejos y al vez temerosos para los ganados; no dudo que los animales presienten a  lo que les viene después, por los mugidos.

La orquesta ameniza con sus repertorios acorde al momento dando vueltas por el corral.

Ya las gentes acapararon sus lugares


  Hasta dejaron de moler su "Uchucuta".


 Los animales caen una a uno hasta el último.  

 Mientras, los padrinos bailan en un espacio del corral.

  Yo, buscando otro lugar mejor

Y, hasta que lo encontré...el rico "Chamiscol"... para la noche.

Es la primera vez que he visto una herranza. Ahora, no sé, si así son en todas las herranzas. En esta, uno tenía que tener ojos por todo lado. Digo esto porque, los caramelos las Madrinas, de cada animal concluida con las cintas y collares, lanzaban con tal fuerza que era preferible que caiga al suelo; peor eran las botellas o envases de gaseosas y de licor lanzadas por las Madrinas; felizmente, creo, que las asistentes ya tenían conocimiento de la forma tradicional de lanzar los obsequios por las Madrinas. Lo bueno que todos gozaban del momento en algarabillas; felices por todo lado; Igual lo demostraban la Orquesta y los Wuaqrapukos.

Y bien, todo se acaba. 

Me despedí de todos, con un "Hasta otra oportunidad". Pero muy especial fue la despedida con la hijita de Don Alejandro Quispe, que en el trayecto de mi bajada a Azángaro me encontré con Ella; dado que no estaba seguro de encontrarme con sus padres a quienes deseaba encontrarme y despedirme; fue Ella la portadora de todo mis agradecimientos por el hospedaje y la alimentación que me brindaron sus padres mientras mi permanebncia; merecido fue la foto, para tenerla de recuerdo: mi pequeña Nelsy.


Mi pequeña NELSY.


El domingo 21 de Agosto, y con la misma "Empresa Azangarino", de “Popi” Quispe Arias, regresé a Lima, Callao.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio